lunes

Josè Emilio Pacheco

Alta traición
No amo mi Patria. Su fulgor abstracto
es inasible.
Pero (aunque suene mal) daría la vida
por diez lugares suyos, cierta gente,
puertos, bosques de pinos, fortalezas,
una ciudad deshecha, gris, monstruosa,
varias figuras de su historia,
montañas
(y tres o cuatro ríos).

1 comentario:

Anónimo dijo...

Espectacular el poema. Es eso lo que siento. La Patria tiene algo de cotidiano.